¿Estar o no estar en redes sociales? ¿Ésa es la cuestión? ¿O no?

Hoy en día es habitual que, cuando tienes un negocio, te preguntes si debes estar en redes sociales o no. Pues bien, nosotros consideramos que estar o no estar no es una opción, es una necesidad.

En un mundo globalizado y conectado como el actual es imprescindible estar presente en aquellos lugares en los que nuestros clientes interactúan y, hoy más que nunca, nuestros clientes están y pasan gran parte de su tiempo en las redes sociales.

El nuevo entorno 2.0 ha supuesto un nuevo panorama para las empresas con la aparición de los medios sociales, que permiten a los usuarios situarse en el centro de atención, ofreciendo una comunicación bidireccional con las compañías. Por ello, es imprescindible que las empresas estén presentes en este ámbito. Ello no implica que estén en todas las redes sociales habidas y por haber, si no que en función de su negocio, su estrategia y sus objetivos, deben inclinarse por unas o por otras.

La marca está en poder de los consumidores y, aunque no queramos, se va a hablar de nosotros en la Red. Entonces, ¿no será mejor estar presentes, escuchar y aprender de lo que hablan los mercados? Es evidente que las empresas necesitan una gestión de estos medios.

Si estás, hazlo bien

Eso sí, si vamos a estar en redes, debemos hacerlo bien. No podemos optar por hacer lo que hacen todos, o simplemente crear una cuenta sin contenido o contar con personas que no cuentan con la formación adecuada, porque en redes sociales una pequeña brisa se puede convertir en un huracán que acabe con nuestra marca.

Debemos  tener en cuenta que es preciso contar con profesionales que dominen el lenguaje, el ámbito o los comportamientos habituales de los usuarios de estos medios. Sobre todo, porque cada vez son más las personas que utilizan las redes sociales para llamar la atención de la empresa ante un mal servicio, como si fuese una especie de servicio de atención al cliente.

En estos casos, la mayoría de las empresas intenta solucionar el asunto en privado, invitando al usuario a contactar de otra forma y no a la vista de todos los seguidores.  Pero, en ocasiones, cuando no se piensan con detenimiento las cosas o no se usa el sentido común, se opta por soluciones demasiado drásticas que pueden herir la sensibilidad de la comunidad que nos sigue, desarrollándose una crisis de reputación en un abrir y cerrar de ojos.

Por lo tanto, es imprescindible aplicar el sentido común y los conocimientos básicos acerca del mundo de la comunicación  a la hora de estar en redes sociales para evitar crisis de reputación que puedan dañar la imagen de nuestra empresa.


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